Hace unos días la memoria de mi móvil se llenó, de vez en siempre cuando pasa, culpa de esa manía incontrolable que tengo de hacer fotos a todo. Ha sido una buena excusa para organizar las carpetas de mi disco duro y darme cuenta lo largo que ha sido mi año...
2013 empezó con buen pie y como a mi me gusta: viajando. Tras darle muchas vueltas al tema, decidimos irnos a Lisboa, una decisión totalmente acertada. Fuimos sin ninguna pretensión y volvimos enamorados: comer un pastel de nata a orillas del Tajo es algo que ni todo el dinero del mundo paga. Aquí tenéis unas fotos extras de aquel viaje.
Febrero y Marzo han sido mis meses de reflexión, de vez en cuando viene bien disfrutar de la rutina casa-trabajo-bar. Y para desconectar de la ciudad grande, Semana Santa en el pueblo :)
La primavera es una buena época para visitar Canadá, así no te mueres de hipotermia con las bajas temperaturas del invierno ni horneado con las del verano. Nuestra primera parada ha sido Québec, capital del estado de mismo nombre, un trocito de Francia en el otro lado del Océano Atlántico.
De Québec nos fuimos a Ottawa, capital de Canadá. Aprovechamos para pasar la noche en una antigua cárcel, conocer el Parlamento canadiense y comer poutine, plato típico québécois.
Y una visita a Canadá no está completa si no te dejas caer por Montreal y perderse en las calles cubiertas de pinturas del barrio de los artistas. El fin de tarde apreciando las vistas del Mont Royal también hacen el viaje mucho más interesante.
Pero no todo son flores, la vida me obliga a hacer una pausa e irme a casa...
A la vuelta de Brasil, ¡Istanbul me llama! Un par de días allí a trabajo coincidiendo con las protestas turcas, la única razón para que no tuviera ganas de ampliar mi estancia. Habrá que volver cuando los turcos pongan orden en su tierra.
Empieza el verano en España y Madrid gana colores nuevos. ¿Viajar porqué si aun tengo tanto que ver por aquí?
Además, es en verano cuando celebran la fiesta más divertida y multitudinaria del año: el Orgullo Gay!
Agosto llega y el aire acondicionado se transforma en mi amigo inseparable. Decido entonces escaparme a Canadá una vez más a ver si los vientos del norte me traen una brisa fresca. Llego a Montreal y ¿qué me encuentro? El Orgullo Gay! Obviamente, no tan multitudinario como el de Madrid, pero mucho más divertido.
Labor Day en Canadá es una estupenda excusa para escaparse a EEUU y volver a la ciudad que nunca duerme. De paso nos acercamos a la Estatua de la Libertad a ver si la han restaurado bien tras el paso del huracán Sandy.
Mi vuelta a España no dura mucho y me jefe decide enviarme de viaje una vez más. Empezando por Amsterdam y terminando en Budapest.
Menos mal que podemos hacer nuestros meetings durante un crucero por el Danubio, el viaje se hace mucho más interesante asi :)
Después de tantos Kms e incontables horas de aeropuerto, me merezco un descanso. Así que me cambio el meeting en el Danubio por un meeting en el Santiago Bernabéu.
Para no perder la costumbre, escapada al pueblo. El otoño ya se asoma a la esquina y el hayedo de Bonicaparra empieza a coger un tono anaranjado digno de apreciarse.
Y las vacaciones de diciembre empiezan como no, viajando. Partimos hacia Toledo, antigua capital española a tiro de moco de Madrid. Estupendo día para hacer pic-nic a orillas del Tajo (si, el mismo que desemboca en Lisboa).
Seguimos la ruta y hacemos una parada en el Monasterio de El Escorial, palacio durante siglos usado como residencia de la Familia Real española y hoy ocupado por los frailes de la Orden de San Agustín, quienes cuidan de las tumbas de todos los reyes que ha tenido el reino. Una visita que vale mucho la pena.
Siguiente parada: Burgos. Me faltan dedos para contar cuantas veces he estado en Burgos y cuantas veces más pienso volver solo para mirar las torres de su catedral desde el mirador del castillo.
Y como los buenos hábitos hay que mantenerlos, un pitstop en Logroño para comer sus fabulosos champis a la plancha de la Calle San Juan (la hermana pequeña de la famosa Calle Laurel) es algo que hasta el más tonto no se lo pierde.
Y terminamos el 2013 tal y como hemos empezado: viajando. El destino elegido ha sido Asturias: Avilés & Centro Niemeyer, Oviedo, Gijón, Canga de Onís, Bulnes y Lagos de Covadonga para cerrar la escapada con llave de oro.
A por el 2014 ahora :)
Fotos @ Lugaresquever